martes, 29 de abril de 2014

Apuntes histórico-cronológicos sobre Calañas (V)



SIGLO XVIII.-


            En 1.703, se informa por el Visitador del Arzobispo, de las circunstancias generales de Calañas y en especial de su Parroquia: “Esta villa consta de 600 vecinos los mas pobres jornaleros y el principal caudal es el del Capitán Juan Martín Arraias, que tendrá 10.000 ducados y ay unos cuatro caudales más de 2.000 ducados, pero no hay muchos pobres de solemnidad; la gente es aplicadísima al trabajo y es la principal cosecha de esta villa, trigo y cevada en mediana abundancia, la de miel y cera no es tanta y se cría algún ganado de ovejas, cabras y zerdos, habiendo algunos montes para engordarse. Ay en ésta villa médico de admirable crédito que lo es don Lorenzo Domínguez Márquez. Maestro de gramática lo es don Bartolomé González. Subdiácono y maestro de niños lo es Benito Gómez Javonero.”

            En 1.717, se contabilizan 21 capellanías, entre cuyas propiedades existían las del clérigo Alonso Rodríguez, que tenía un pinar al sitio del Castillo (distante de la población dos tiros de vala). La del doctor don Blas Márquez que tenía un cercado de pan sembrar en la solana del castillo.

            En 1.726, existe un documento fechado el día 7 de enero, en el que consta el reconocimiento que se hace para resolver el litigio por el deslindamiento de los términos de Calañas y El Cerro, especialmente en el mojón siguiente al de Mojón Blanco hasta el que está en el Cabezo del Moralejo.

            En 1.728, en un documento de Visitas (23-5-1728) que se encuentra en el Archivo Arzobispal de Sevilla (T-1.370), se dice que en Calañas existen cinco ermitas: Jesús Nazareno (que está algo maltratada), la de San Sebastián y San Roque, la de Ntra Sra Coronada, Ntra Sra de España y Ntra Sra de las Flores que se está acabando de labrar (por documentos posteriores se sabe que éste ermita es la contenida en el Beaterio).

            En 1.723, el 24 de abril se iniciaron los trámites para la construcción de “un puente sobre el río Odiel”. El expediente llegó al Consejo de Sevilla, quien lo declaró como “obra pública”, teniendo que ser sufragado por 75 municipios. En él intervienen como maestros de arquitectura y obras, Manuel Albarez para inspeccionar el lugar adecuado de su situación, y para su diseño y ejecución, Pedro de san Martín, Ignacio Moreno, Francisco Escasean y Ambrosio de Figueroa, siendo su ejecutor Francisco Sánchez de Aragón. Los trabajos se desarrolaron hasta final de los años setenta.
En Agosto de éste año, Don Rodrigo  Caballero Yllanes hace donación a la Virgen de Coronada de unas alhajas que en sus festividades de agosto y septiembre y en las ocasiones de rogativas que la llevaren en procesión a Valverde, Calañas o Beas, pueda ir adornada con ellas.

            En 1.751, el 10 de septiembre y en la Posada del Sr don Joseph Quintana Cevallos, se formalizan las Respuestas Generales del Catastro del Marqués de la Ensenada. Ante algunas dudas, se formalizan aclaraciones en el año 1.754. Entre los importantes datos que se reflejan, y que dan una idea de la realidad de Calañas, caben destacar la existencia de diez molinos harineros de Agua, un molino de viento, un batán, una atahona, cinco lagares de “huba”, dos de cera, tres hornos de cozer teja, dos mesones, una carnicería, cuatro tiendas de especería, lienzos y algunas cosas comestibles, un abastecedor de carnes, un abastecedor de vino, dos médicos, dos boticarios, dos cirujanos y tres barberos, un escribano de cavildo, u escribano de millones, un escribano de alcabalas, ciento sesenta arrieros, tres maestros de primeras letras, un estanquero de tabacos, un sochantre presbítero, un sacristán, un organista, cinco traficantes de cera, nueve tratantes de ladrillo, un guarda montes, dos traficantes de ganado cabrío, tres traficantes de zecina, cinco traficantes de zuela, un abastecedor de jabón, un correo, un cobrador de propios, un ministro ordinario, un pregonero, un cortador de carne, un notario eclesiástico, un abogado eclesiástico, tres maestros albañiles, tres maestros carpinteros, cinco maestros herradores, seis maestros herreros. Once sastres, dos oficiales de barbero, dos zapateros de lo viejo, seiscientos diez jornaleros, diez pobres de solemnidad, veinte eclesiásticos de los que son dieciséis sacerdotes y cuatro menores. Que hay un Beaterio de Carmelitas Descalzas con nueve Beatas. Que los vecinos que hay en el pueblo son ochocientos cincuenta y seis. Que las casas son setecientas y noventa en que se incluyen ocho arruinadas. Que los propios tienen el común y consisten en las Casas Capitulares, Pósito, Casa para el Recogimiento de los Pobres, Alfolí y Corral del Conzejo. Que el Mesón de Pedro García Bernabé es propio de Máxima González vecina de la villa de Huelva, y el de Emerencia Martín es suyo. Que Juan Macías Delgado y Juan González son barbero sy sangradores. Don Benito Fernando Vélez, Agobado. El guarda de montes era Juan Pérez Cosedera. El Ordinario era Gregorio Alonso Moxarro, vecino de Valverde del Camino. Tratantes de chacina son Joseph Gomez Cid, Rodrigo Márquez Reduan y Diego Monge. Y de cera, María Leonor de Cristos y Juan Docenas. Hay tres zapateros. El Mayor Hacendado era el vecino Lorenzo Vélez Blanco, que poseía 479 medidas de tierra.

CALAÑAS 2014

Apuntes histórico-cronológicos sobre Calañas (IV)



SIGLO XVII.-

 


            En 1.619, por el testamento del Doctor Rufio de Tapia, cura de Calañas, fechado el 20 de agosto de ese año, se sabe de la fundación por él realizada de la Obra Pía y Patronato de Pobres.


            En 1.622, según consta en el Archivo del Obispado, en ese año existían en Calañas las Cofradías del Santísimo Sacramento, Vera Cruz, Nuestra Señora Del Carmen, Ánimas y Nuestra  Señora Del Rosario.


            En 1.624, el día tres de enero, se presenta la provisión del duque de Medina y Conde de Niebla por el que se nombra como Capitán y Alcaide de la Fortaleza y Castillo de Calañas, al vecino de Trigueros Don Rodrigo de Vallejo Solís. En la relación de los cobradores de alcábalas y en la de los empréstitos del Pósito de Calañas se describen las calles Rincón, Quemada, Mesones, Barrio y Benefique. En 1.625, se repiten las mismas calles, además de las de Pozo, Fuente, Cañada y Primera Cañada (Archivo Municipal de Calañas Leg nº 1).


            En 1.629, se dictan normas por el Duque para corregir el comportamiento de las personas en las procesiones y manifestaciones del Ssmo. Sacramento: “.. que los que estuvieren en las calles por donde pasase han de estar de rodillas todo el tiempo que se detuviese en pasar su divina Majestad y quedar en la dicha forma hasta que no se vea.” “ Que en las procesiones que se hiciesen por los claustros o naves de la Iglesia todos los hombres que asisten vayan en ellas con velas o sin ellas sin quedarse arrimados a las paredes o pilares”. 


            En 1.654, se establece un pleito entre Pero Alonso Hurraco y Blas Martín, sobre el nombramiento del primero como ermitaño de la de Ntra. Sra. De la Coronada, otorgado por el Señor Don Antonio de Mendoza, Marqués de San Miguel, en virtud del poder que tuvo del Señor Don Mateo de San Martín, Prior de Ermitas.


En 1.672, el 29 de julio, se concede licencia para instalar la Imagen de Ntro Padre Jesús Nazareno en la Ermita que se acaba de hacer, con limosnas del vecindario, con el Título de Humilladero. Al año siguiente aparecen escrituras de censo redimible a favor de la ermita que se ha hecho del Cristo de los Nazarenos, hipotecando las casas de sus moradas varios vecinos, casas que están en la calle Mesones (lindando por una parte con la calle Manefique y por la otra con las de Sebastián Domínguez), casa en la calle Larga y casa en la calle de la Fuente.

CALAÑAS, 2014

martes, 1 de abril de 2014

Apuntes histórico-cronológicos sobre Calañas (III)



SIGLO XV.-

            En 1.435, en el documento del Memorial del Pleito que sobre la propiedad del Campo de Andévalo sostuvieron la ciudad de Sevilla y el Conde de Niebla, se dice que es enviado el Licenciado Gonzalo Rodríguez de Aullón por el Rey Juan II para deslindar el territorio y se dice lo siguiente:
“dentro de los límites de éste campo de andebalo posee oy el duque de medina y su villa de niebla el castillo de la peña alhajeque que es alfaía de la peña y en el término de él esta poblada la alcaría de Juan Pérez que aora se llama La puebla de guzmán con la dehessa de la cubica y posee más el castillo de sotiel (en el Cerro de la Castillejita) en cuío termino esta el lugar de calañas con su castillo (en el Morante) y dehessas y alcarías”.
            El miércoles 22 de noviembre de 1.435 se reúnen junto a varios testigos del lugar el licenciado Ayllón y el escribano Fernán García en la Cabeza de Andévalo para deslindar las tierras inmediatas que desde allí se divisaban, y a las preguntas del Licenciado, los testigos manifestaron: “.. que las tierras que el dicho señor conde e su mandado toman de las que allí se parecían del dicho campo de andebalo son desde dos caveÇas que parecían a la mano izquierda mirando el home hacia donde se parecía el agua de la mar que dicen que se llaman caveÇas de dos hermanas (actual Morante) que son cerca de la alcaria pinta...” Es seguro que se trata de los picos que hoy constituyen el Morante y que estabn cerca de la Alcaria Pinta que también estaba en la limitación de Calañas, ya que ambas están a la mano izquierda mirando desde el Cabezo de Andévalo con frente al sur, tal como se describe.
            El domingo 26 de noviembre de 1.435, estando en un oteruelo que dice que es cerca de la higuera del gamito (una de las cuatro partes en que se dividía la Dehesa Boyal Concejil) cerca del arroyo de la angostura, (viene desde El Cerro y se une al arroyo Tamujoso por su margen derecha en el término de Calañas) respondieron que sí, que el dicho caveÇo con otras tierras que se parecían siguiendo adelante a la mano derecha como esta hombre de cara a calañas..”

            En 1.492, uno de los testimonios que se aportan en el citado pleito, es la escritura por la que el 11 de abril de ese año, le fue pedido por el vecino de Calañas, Diego Martínez al cabildo de la ciudad de Sevilla, licencia para que, en el término de dicho lugar, entre los guadaperosos y la coronada y cerro odiel, puediese poblar una majada de colmenas; y la ciudad mandó al concejo de Calañas que vean si de ello viene Perjuicio.


SIGLO XVI.-

            En 1.504 las Ordenanza número 4 para el Condado de Niebla dice: “Otro sí, porque es menester para las dichas fortalezas y sus reparos cal y teja y ladrillo, mando que todo el diezmo que oviere en toda mi tierra sea para las dichas fotalezas... A la fortaleza de Calañas ha de dar el mismo lugar y Villanueva de las Cruces.”

            En 1.503 y 1.534, los padrones de riqueza vecinal nos dicen que en Calañas había 146 vecinos (1503) y 245 vecinos (1534). 


            En 1.517 aparece la Descripción y Cosmografía de España, de Hernando Colón, en la que está relacionada Calañas: “Çalamea e fasta Calañas ay tres leguas de sierra morena agra por algunas partes e a dos leguas primeras pasamos el dicho rrio odiel...e fasta facanyas ay cinco leguas de sierra e de portezuelos e fasta calañas ay cinco leguas de syerras e van por facanias cinco leguas..”
            En 1.549, (Ladero Quesada, 1992) se habla del sorprendente aumento del vecindario del Campo de Andévalo, lo que indica que al actividad ganadera creaba riqueza y trabajo: la Puebla de Guzmán y Calañas eran las localidades principales, y su crecimiento continuaba en 1.549 (361 y 282 respectivamente).
            Desde 1.564 a a 1.594 aparecen multitud de datos relativos al lugar de Calañas, bien en legajos del Archivo Municipal de la Villa o en Protocolos Notariales o testamentos privados.
  
CALAÑAS, 2014