SIGLO XX.-
En 1.900, en marzo, se acuerda la
construcción de un caño subterráneo que atravesando la carretera que
pasa por detrás del Muelle(de la mina) del Tinto le de salida a las aguas
pantanosas que se detienen en aquel sitio, procedentes de las lluvias y
máquinas del cable. En el Pleno Municipal del 14 de mayo, que preside Don
Rodolfo Jimeno Domínguez, se acuerda entre otros, lo siguiente: “ proceder a la
demolición de todas las peanas existentes en las calles de la población y cegar
los pozos abiertos en medio de las calles al considerar que las primeras ocupan
las aceras de las calles y que los segundos son un obstáculo y un peligro en la vía pública”. El día 21 del mismo mes
se acuerda variar algunos nombres de las calles siguientes: A la parte baja de
la calle Talero (hoy José Echegaray) se denominará Don Sancho Hidalgo; la
calle Conde de Gomar pasa a ser Don José Troyano; la calle Quemada pasa
a Conde de Gomar y a las filas de casas del Llano de la Peana, se les
llamará Los Silos. Se aprobó la compra de la casa nº 10 de la calle
Ortiz de Pinedo, propiedad de Isabel Gómez, al objeto de abrir allí una calleja
que ponga en comunicación directa la importante calle Romero Robledo (Barrio)
con la de Ortiz de Pinedo (Manefique).
En 1.904, el día 31 de diciembre la
Compañía The United Álcali adquiere la Companhia Mineira Sotiel Coronada, así
como el ferrocarril de Buitrón a San Juan del Puerto junto con las minas
Castillo Buitrón, Poderosa y Concepción. El director de la mina hasta 1.907 es
Juan Cresswell.
En 1.908, se concluye la construcción
del Pantano del Calabazar.
En 1.909, en el Pleno Municipal del 13
de febrero, que preside Don Rodrigo Márquez Baquero, se da cuenta de un escrito
de 40 vecinos suplicando “...que las mujeres de vida airada que habitan en las
tabernas o edificios del Real de la Feria se priven de dar los espectáculos
repugnantes que con el mayor descaro vienen dando contra la moral y buenas
costumbres”. Se acuerda “hacerlas desalojar las viviendas del Paseo del Real y
que de consentirse vayan a habitar en puntos apartados de la localidad sin
salir a la vía pública a no ser en casos de necesidad...”
En 1.910, trabajan en Sotiel unos 665
obreros (300 mineros) distribuidos en los llamados Filón 8, filón 13, Filón
Tiberio, Corta, Masa Grande y Masa Caliente. El pozo San Luis es el central de
extracción y el pozo San Antonio el de desagüe. El taller cuenta con 65
operarios (carpintería, fragua, ajuste y reparación). La escuela alberga a unos
250 alumnos, siendo los maestros Tomás Guerra Bejarano y María Josefa García
Avilés.
El servicio sanitario esta constituido por el médico titular Francisco
Alfonso Salazar, el practicante Blas Vázquez y la enfermera Angeles Miyares
Fernández, con un hospital bien montado, con despacho, sala de curas, sala de
operaciones, sla con seis camas para heridos, cuarto de baño y viviendas para
el médico y enfermera. (Libro de visitas de la Inspección de la Jefatura de
Minas de Huelva).
El 1 de julio se trata de la necesidad de reparar la Casa de
Ayuntamiento Viejo para destinar la parte alta a Oficina de Telégrafo y
habitaciones para el telegrafista y la baja para el Juzgado Municipal, pasando
la Escuela de Párvulos a la plata baja del local propiedad de Don Ramón Regajos
en la calle Conde de Gomar.
En éste año (1.910) Calañas, con 12.707 habitantes, alcanza la mayor
cantidad de población de su historia.
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